top of page

Kunta Kinte no lo entendió

  • Foto del escritor: Carlos Luro
    Carlos Luro
  • 15 mar 2021
  • 2 Min. de lectura


A lo largo de las generaciones, ni el mismo Kunta Kinte(*) ni su prolífica descendencia, lograron entender porque no podían- los cultores de la supremacía blanca- aceptar las incomodidades que conlleva (para los esclavos), la condición de esclavitud.

Un diálogo en el que parecía imposible encontrar un mínimo acuerdo o concordancia.

Tal cómo nos pasa a veces en las empresas. Dónde los normales intercambios de opinión derivan en discusiones que toman rumbos inesperados, en donde resurgen problemas anteriores, rencores y/o conflictos no resueltos, y que van alejando el debate del planteo que le dio origen.

Y por supuesto de la solución buscada, o al menos, del intento de comprender mejor el origen del problema.

Como primer paso para la resolución de las habituales contingencias laborales de todos los días, es verificar que todos hablamos de lo mismo. Qué, al menos, entendemos lo mismo sobre lo que se debate.

Primer paso antes de intentar cualquier solución: ¿Entendemos lo mismo?

¿Coincidimos en el propósito? ¿No se altera el objetivo estratégico establecido?

Después vendrá el debate sobre posibles soluciones; la propuesta consensuada y finalmente la puesta en práctica de la solución acordada.

La adopción de decisiones tomadas por consenso es uno de los más relevantes pasos en la evolución del management directivo.

Las decisiones no las toma en soledad un líder inspirado y autocrático sino que surgen como resultado del aporte colaborativo y solidario de todos los involucrados. Tanto los que detectan el origen del problema como de quienes padecen las consecuencias en el proceso que falló.

“Uno debe pensar en el sistema como un filtro a través del cual pasan las ideas” (*) Robert T. Moran

Más que un sistema esto es un proceso (conocido por los japoneses como “Ringi”) que posibilita ir conociendo, entendiendo, recabando y documentando, las distintas y diversas maneras en que se gestionan los hechos en la realidad.

Este proceso implica mantener permanentemente conversaciones e intercambios multidisciplinarios, en los distintos niveles de la empresa, en donde todos los involucrados van “apropiándose” del tema, involucrándose con compromiso y aportando sus puntos de vistas. El conocimiento colectivo generado en el proceso, es de una riqueza no siempre valorada en su real dimensión.

Las decisiones tomadas así por consensos, -que no significa que no pueda lograrse a pesar de opiniones y puntos de vistas divergentes-, puede ser más lento que una decisión temperamental y apresurada.

Pero, con el debido sentido de urgencia que cada situación demanda, es seguramente mucho más sólida, consistente y perdurable que una resolución antojadiza y del momento, que generalmente omite puntos que a la corta o a la larga esterilizan la propuesta de solución…agregando nuevos problemas.

Cuándo a una propuesta le agregamos el debate previo, la confrontación de ideas, los puntos de vistas divergentes, la persuasión ante argumentos racionales y la honestidad intelectual nos encontramos que también en las empresas se puede y se debe combatir la denominada ética utilitarista.

Etica o “modus operandi”, en la que se arbitran medios para conseguir fines suprimiendo por completo el imprescindible momento de la deliberación acerca de la bondad de algunos medios que se eligen… y de la razonable conveniencia de los fines que se alcanzan.




(*) Kunta Kinte; protagonista de la novela Raíces de Alex Haley

Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Shinka Consulting

Contactános

WP.png

+ 54 11 2332 4662

qrcode_whatsapp.png

Seguínos

Sumate a nuestra comunidad!

No te pierdas ninguno de nuestros newsletters.

© 2015 por Consulting Shinka SRL.

Buenos Aires - Argentina - 

bottom of page